Vitelio, Aulo. Emperador de Roma (15-69).

Emperador romano (69 d.C.) nacido el 24 de septiembre del año 15 d.C. y muerto el 20 de diciembre del 69 d.C. Hijo de Lucio Vitelio, quien había llegado a ejercer gran influencia al ser censor y cónsul en tres ocasiones junto al emperador Claudio. Se educó junto al emperador Tiberio y con éste presenció y participó en todos los desmanes que se llevaron a cabo en la isla de Capri. Mediante adulaciones consiguió ser nombrado cónsul en el año 48 d.C. y procónsul en la provincia de África en el 61 d.C. Durante el gobierno del emperador Galba, recibió el mando supremo de las legiones romanas asentadas en la Germania inferior. Tras el asesinato de Galba a manos de Otón, Vitelio fue nombrado emperador por sus propias tropas con el sobrenombre de Germánico. Mientras tanto, en Roma Otón era aclamado por el Senado. Otón conocía la fuerza de su rival, que gozaba de la confianza de gran parte del ejército. Aquello le movió a proponer una paz basada en el reparto del Imperio, proposición que fue rápidamente rechazada por Vitelio.

Las tropas de Germania, comandadas por los generales Fabio Valente y Alieno Cecina, marcharon al encuentro de las tropas del emperador Otón, que en aquella ocasión tenían a su frente a Annio Galo y Vestricio. Tras una serie de victorias iniciales, las tropas imperiales fueron aplastadas en la primera batalla de Bedriacum, (Bedriac), que tuvo lugar a los pies del Po en abril del año 69 d.C. Tras la derrota, el emperador Otón se suicidó sin esperar la llegada de refuerzos acantonados en Dalmacia, Panonia y Misia. A continuación, Vitelio emprendió el camino triunfal que le llevaría a Roma, donde fue proclamado emperador a manos del Senado a principios de julio del mismo año 69 d.C. Una vez asentado en la ciudad, su primera medida fue la de dar muerte a los asesinos de Galba, de quien se erigió en vengador. Así mismo, reorganizó las cohortes pretorianas con sus propios hombres, evitando con ello posibles traiciones.

El nuevo emperador Vitelio se mostró siempre muy hostil con la nobleza senatorial, a la que relegó de numerosos cargos en los que situó a miembros del orden ecuestre. Suetonio no tuvo una buena opinión de Vitelio. Según el relato del historiador, el emperador pasaba el día disponiendo comilonas, orgías y asesinatos. Tales ocupaciones le granjearon muy pronto importantes enemistades. Del mismo modo, se sucedieron revueltas en las provincias de Mauritania, Misia, Panonia y Siria, donde el emperador no contaba con el aprecio de las tropas. El jefe de los ejércitos de Judea, Vespasiano, molesto por la inclinación mostrada por Vitelio hacia las tropas del Rin, a las que debía el trono, movilizó un gran contingente en su contra e incluso fue nombrado emperador a manos del prefecto de Egipto, Tiberio Julio Alejandro, el 1 de julio del 69 d.C. Una parte de las tropas rebeldes, mandadas por el gobernador de Siria, Licino Muciano, emprendió la marcha a Roma. Los ejércitos del Danubio, comandados por Marco Antonio Primo y Petilio Cerialis, se unieron rápidamente a la marcha. Mientras tanto, Vespasiano acudió a Alejandría, donde aseguró el control sobre el cereal.

Los mismos que habían ayudado a subir a Vitelio, sus generales Valens y Cecina, le traicionaron en aquellos momentos en el norte de Italia, lo que favoreció la victoria de Antonio Primo en la segunda batalla de Bedriacum (Bedriac) en octubre del año 69 d.C. La inmediata entrada en Roma de las tropas de Vespasiano provocó el pánico en la ciudad. Vitelio, sintiéndose acorralado, trató de abdicar mediante negociaciones con Muciano, pero su guardia pretoriana lo impidió. Muciano y Primo mantuvieron su posición en los alrededores de la ciudad hasta la llegada de Vespasiano, a finales del verano del año 70 d.C. La entrada triunfal en Roma se produjo el 20 de diciembre. Vitelio intentó desesperadamente salvar su vida y huir, pero fue apresado y asesinado con gran crueldad por sus propias tropas, quienes entregaron su cuerpo al populacho. El Senado proclamó emperador a Vespasiano el 21 de diciembre del 69 d.C., aunque su entrada en Roma no se produjo hasta septiembre del año 70 d.C.

Bibliografía

• GARZETTI, A. L'Impero da Tibero agli Antonini. (Bologna; Licinio Capelli, 1960).

• NICOLAS, E.P. De Néron à Vespasien. (París; Belles Lettres, 1979).

• SUETONIO, C. Los doce Césares. (Barcelona; Iberia, 1985).

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