Puig, Manuel (1932-1990).
Escritor argentino, al que se le conoce por lograr un ruptura respecto de la formulación tradicional de la novela de corte intimista. Sus obras más importantes son: El beso de la mujer araña (1976), Boquitas pintadas (1969), The Buenos Aires Affair (1973), La Traición de Rita Hayworth (1968), y Pubis angelical (1979).
Hacia el final de Sobre héroes y tumbas de Sábato, el héroe, Martín, tiene un encuentro curioso y simbólico con Hortensia Paz, una mujer sencilla, para quien escuchar los discos de Gardel significa la más pura felicidad. Con este pequeño episodio los mundos de Sábato y de Manuel Puig -tan diferentes entre sí- se tocan momentáneamente. Pero la inmensa diferencia entre los personajes de Sábato y los de Puig subraya la originalidad de este último. La mayoría de los personajes de Sábato, así como los de Mallea, de Cortázar, del primer Onetti y hasta cierto punto de Arlt, pertenecen a la inteligencia porteña; la angustia que muchas veces sufren está íntimamente relacionada con su capacidad de buscar en sí mismos, de analizar su entorno, de darse cuenta cabal de su circunstancia de individuo dentro de la masa. En cambio, los personajes de Puig, sobre todo en sus primeras dos novelas, son precisamente eso: masa. Aparte de las criadas, que pertenecen -si bien con una pronunciada conciencia de clase- a un grupo intermedio entre el proletariado y la baja clase media, el resto son personajes de mediocre inteligencia, emocional y sexualmente frustrados, condenados a una existencia gris y decepcionante, que se entregan a pobres sueños que ni siquiera son suyos, y que viven pendientes de las modas musicales, de lo que les ocurre a las estrellas de la radio o el cine; son, de alguna manera, hijos de la cultura pop. A las mujeres sobre todo, y en las tres primeras novelas de Puig predominan personajes femeninos, esta cultura pop les proporciona el modelo para construir mundos de fantasía en que refugiarse. Para acentuar más el contraste entre la mezquina realidad y los ensueños inspirados por el cine, las fotonovelas y las canciones sentimentaIes, Puig ambienta La traición de Rita Hayworth (1968), y Boquitas pintadas (1969) en los años 30 y 40, en el pueblo relativamente aislado de Coronel Vallejos, a casi quinientos kilómetros de Buenos Aires. La traición de Rita Hayworth nos ofrece una radiografía de la vida secreta de este villorrio de Ia pampa, mediante una serie de monóIogos interiores, diálogos, diarios y cartas de un grupo de vecinos más bien jóvenes: un matrimonio no muy feliz, su hijo afeminado, un sobrino más rudo y varios amigos y conocidos. El acierto esencial de Puig reside no tanto en el hecho de haber sabido apartarse de la novela urbana y existencial de Sábato y Cortázar, ni al de haber incorporado a la psicología de sus personajes el influjo condicionante del pop-art, sino en su asombrosa capacidad de captar las distintas formas de expresarse de todos los personajes.
Boquitas pintadas, filmada por Torre Nilsson en 1974, repite con hábiles variantes la fórmula de la novela anterior. "A mí me interesaba un aspecto en especial -afirmó Puig en 1977-, esta gente había creído en la retórica del gran amor, de la gran pasión, pero no habían actuado de acuerdo a ella."
The Buenos Aires Affair, prohibida en España por algún tiempo, desarrolla el tema de la frustración sexual. Esta vez, los trozos de diálogo que encabezan todos los capítulos son textos sacados de películas de la Garbo, Bette Davis, Joan Crawford y otras estrellas de los años 30 y 40 que comentan irónicamente los probIemas sexuales de Gladys y Leo, los dos protagonistas. Puig declaró que escribió esta novela con el propósito de desmitificar todo lo que haya de tenebroso, de tabú en la sexualidad.
Puig es un novelista irónico y sentimental que logra hacer convivir en él la burla y la compasión más comprometida por los más débiles y desamparados.
