Hewitt, Lleyton (1981-VVVV).
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- Lleyton Hewitt.
Tenista australiano, nacido en Adelaida el 24 de febrero de 1981, campeón del Open de Estados Unidos y del Masters en 2001, de Wimbledon en 2002 y uno de los tenistas más destacados en el comienzo de la década de 2000. Dotado de excelentes condiciones físicas y técnicas, y conforme a la tendencia que ha marcado el tenis mundial durante los años noventa, Hewitt se ha encaramado a la élite de este deporte siendo casi aún un adolescente, y con apenas veinte años ya puede presumir de un palmarés brillante que para sí quisieran muchos veteranos. Finalizó 2001 a la cabeza de la clasificación ATP y, con 20 años y ocho meses, se convirtió en el jugador más joven de la historia en alcanzar el número uno del ránking, récord que arrebató a Jimmy Connors que en 1974 lo había logrado con 22 años y tres meses.
Comenzó a pegar sus primeros raquetazos con tan sólo cuatro años, y a los seis sus padres, al observar el empeño que ponía en ello, decidieron que tomara clases; por entonces, el tenis sólo era un divertido pasatiempo para el joven Lleyton, como lo era también el fútbol australiano, pero al llegar a la adolescencia decidió dedicarse por completo a ello, y al cumplir los dieciséis, inició su carrera profesional. Bajo la dirección de su entrenador, Darren Cahill, en 1997 se proclamó campeón de su país en categoría juvenil y se convirtió en el jugador más joven de la historia en clasificarse para disputar el Open de Australia, aunque cayó en primera ronda de dicho torneo. En la temporada de 1998 llegó su primer triunfo en el circuito profesional, precisamente en el torneo de su ciudad natal, Adelaida, logró de nuevo calificarse para el Open de Australia, y formó parte por primera vez del equipo australiano de Copa Davis. En 1999 su progresión fue más que evidente: esta temporada venció en el torneo de Delray Beach y alcanzó tres finales más, Adelaida, Scottsdale y Lyon; además, llegó hasta tercera ronda de Wimbledon y del Open de Estados Unidos en la primera ocasión que se clasificaba para ambos torneos de Grand Slam.
El año 2000 fue sin duda el de su consolidación entre los mejores del mundo, con la consecución de cuatro títulos, dos de ellos en su país, Adelaida y Sydney, y otros dos del circuito americano, Scottsdale y Queens, en este último, venció a Pete Sampras en un anticipo de la final del Open de Estados Unidos. Además, fue finalista en el torneo de Stuttgart, y alcanzó las semifinales de Indian Wells, Miami, Cincinatti, Hamburgo y Roma. En cuanto a los grandes torneos, llegó hasta octavos de final en Australia y Roland Garros, y alcanzó las semifinales del Open Estadounidense, demostrando que ya estaba preparado para optar a la victoria en algún Grand Slam, especialmente sobre superficie rápida. A finales de año disputó, como número uno del equipo australiano, la final de la Copa Davis contra España; ganó su primer partido frente a Albert Costa, pero cayó en el punto decisivo de la eliminatoria frente a Juan Carlos Ferrero, al que opuso gran resistencia pese a que se jugó en la peor de las superficies para Hewitt, la tierra batida.
En 2001 repitió victorias en los torneos de Sydney y Queens, a las que sumó S'Hertogenbosch (Holanda). Su eliminación en tercera ronda del Open de Australia a principios de año supuso una pequeña decepción, porque esta vez iba dispuesto a cumplir su sueño desde niño: ganar en la pista central del Melbourne Park. No obstante, y tras ser cuartofinalista en Roland Garros y octavofinalista en Wimbledon, en septiembre llegó su gran momento con la conquista del Open de Estados Unidos, su primer título de Grand Slam: en la final, derrotó nada menos que al jugador con más triunfos en el torneo, Pete Sampras, por 7-6 (7/4) y un doble 6-1; a raíz de este fenomenal éxito, ascendió hasta la posición número tres en la clasificación de la ATP. Meses después, Hewitt coronó una temporada espectacular con la victoria en el Masters de Sydney. El australiano se deshizo de su compatriota Patrick Rafter y del estadounidense André Agassi en la primera ronda y venció al español Juan Carlos Ferrero en semifinales para colocarse en la final y derrotar al francés Sebastien Grosjean. A finales del año 2001, Hewitt se había convertido en el nuevo número uno del tenis mundial aunque no consiguió que su equipo se proclamara campeón de Copa Davis. Francia, como en 2000 había hecho España, arrebató a los australianos la preciada 'ensaladera' en la final.
Inauguró la temporada 2002 con victoria en el torneo de Indian Wells (marzo) y el objetivo confesado de anotarse nuevos títulos de Grand Slam en su prometedor palmarés. No tuvo suerte en el Open australiano, donde partía como favorito y cayó de forma inesperada en primera ronda frente al español Alberto Martín; tampoco en Roland Garros demostró la efectividad de su juego y fue apeado del torneo por el argentino Guillermo Cañas en octavos de final. Sin embargo, la hierba de Wimbledon sí fue talismán para el tenista australiano que optó por confirmar en "la catedral" su condición de número uno mundial y se adjudicó el título más ansiado de su carrera. Disputó la final frente al argentino David Nalbandián, primer debutante que lograba colocarse en la final del abierto británico, y Hewitt se impuso con facilidad por 6-1, 6-3 y 6-2. Ningún jugador australiano había conseguido coronarse en Wimbledon en los últimos quince años. El cruce en semifinales del Open de Estados Unidos con el veterano André Agassi truncó, sin embargo, sus opciones de revalidar el triunfo logrado en 2001. También alcanzó la final del torneo París-Bercy pero perdió ante el ruso Marat Safin. En el Masters de Shanghai, última cita de la temporada, ganó el primer partido frente al español Albert Costa, perdió el segundo frente a Carles Moyà y logró clasificarse para semifinales después de derrotar al suizo Marat Safin. En su camino hacia la final se deshizo del suizo Federer y, en el partido decisivo, logró su segundo título consecutivo de "maestro" frente a Juan Carlos Ferrero.
Como mejores armas en la pista, Hewitt esgrime una enorme movilidad y resistencia física, gran rapidez de piernas, un muy notable servicio, y la consistencia con sus golpes desde el fondo de la pista; es especialmente efectivo en los tiros pasantes y en los restos al servicio, golpes que suelen otorgarle una gran cantidad de puntos, pero sobre todo, destaca por un espíritu luchador determinante, cualidad que le convierte en un ganador nato y según la mayoría de los pronósticos, en uno de los claros dominadores del tenis mundial en los comienzos del siglo XXI.
El número uno mundial inició 2003 con el reto de convertirse en el primer jugador australiano en ganar el Open de su país desde que en 1976 se coronara campeón su compatriota Ken Rosewall. Sin embargo, y como ya ocurriera en sus seis anteriores participaciones, Hewitt no logró pasar de los octavos de final y cayó eliminado ante el marroquí Yunes el Aynaui. También fue apeado de forma sorprendente de la lucha por el título en Roland Garros por el español Tommy Robredo y más inesperada aún fue su derrota en la primera ronda del torneo de Wimbledon frente al croata Ivo Karlovic, un tenista modesto colocado en el puesto 203 del ranking ATP. En el Open de Estados Unidos, su verdugo fue el español Juan Carlos Ferrero. Desilusionado con sus últimos resultados, el ex número uno amenazó incluso con abandonar el tenis y dedicarse a la práctica del fútbol australiano.
MAH
